ASQ Labels se fundó en 1988 en Lummen, época durante la cual el gobierno belga incentivaba la creación de empresas en la zona. En 1998, la empresa de etiquetado contaba con 45 empleados y se trasladó a unas instalaciones de 2000 m2. Inicialmente, ASQ trabajaba en una amplia gama de sectores, pero la reciente crisis económica obligó a la empresa a reevaluar su enfoque.
«Nuestra empresa se concentraba fundamentalmente en las ventas y, hasta el año 2008, tuvimos mucho éxito en los sectores de la automoción, el transporte, la logística y el almacenamiento», explica Raf Joos, director general de ASQ Labels.
«Fue entonces cuando nos dimos cuenta de que debíamos comprometernos con un sector que no se viera afectado por la recesión y de que la industria de los alimentos y las bebidas sería clave para nosotros, ya que siempre habrá demanda de etiquetas de gran calidad con gráficos llamativos que acompañen a los productos. Hoy en día, estamos muy involucrados con los sectores de la cerveza y el chocolate belgas», asegura Raf Joos.
Raf empezó a considerar una solución inkjet UV en 2010, pero en un principio no quedó convencido con la tecnología, ya que todavía estaba poco desarrollada. La empresa necesitaba un sistema que pudiera satisfacer tres requisitos fundamentales. En primer lugar y ante todo, la solución digital tenía que ser capaz de imprimir directamente en los sustratos estándar que utiliza ASQ sin necesidad de aplicar un revestimiento previo. En segundo lugar, el sistema debía ser capaz de imprimir las imágenes brillantes de alta resolución que los clientes de ASQ esperan ver en las etiquetas de sus productos. Y por último, tenía que ser capaz de imprimir etiquetas transparentes.
El momento en que ASQ se dio cuenta de las posibilidades de la tecnología inkjet UV fue cuando observó de primera mano el equipo de impresión digital N610i de Domino en Labelexpo Europe 2013. «Cuando Domino nos invitó a su sede en el Reino Unido, pudimos imprimir diversas muestras de etiquetas en varios de los sustratos flexográficos estándar que utilizamos. No solo nos quedamos impresionados con los resultados, sino que además descubrimos que el blanco opaco que ofrecía el equipo nos resultaría muy útil para la impresión en materiales transparentes. Se trata de un blanco muy opaco, con un aspecto similar a la serigrafía. Fue entonces cuando nos quedamos convencidos con el equipo N610i de Domino», explica Raf Joos.
El N610i funciona a velocidades de hasta 75 metros por minuto con una resolución nativa de 600 dpi y se encuentra disponible en 4, 5, 6 y 7 colores. La tinta blanca muy opaca, que aporta un acabado similar a la serigrafía, es ideal para imprimir desde áreas opacas hasta detalles minuciosos en materiales metálicos y transparentes para etiquetas.
Elke Buckinx, jefa de operaciones, nos habla de la sencilla instalación del equipo N610i. «Todo estaba bien organizado y salió según lo previsto. A las cinco semanas, ya estábamos imprimiendo etiquetas para nuestros clientes. En la actualidad, usamos el equipo de Domino a diario. Tenemos una combinación de nuevos clientes, nuevos encargos y más color. Hemos trasladado algunos de los trabajos que hacíamos antes en las impresoras flexográficas, como las tiradas cortas, y ahora podemos imprimir varias versiones de una vez sin necesidad de cambiar las planchas».
Wim Wouters, que maneja el equipo N610i, comenta: «Es muy sencillo de utilizar y muy rápido: imprimimos a 50 m/min. Además, apenas se malgasta papel y, cuando se vuelve a imprimir un trabajo, el archivo ya está guardado, de modo que se obtiene el mismo color y exactamente el mismo aspecto que en la primera impresión».
«Bélgica es un país conocido en todo el mundo por la cerveza. Aprovechamos la opción de personalización del equipo N610i para imprimir nuestras propias etiquetas de cerveza diseñadas a medida y se las enviamos a nuestros clientes del sector. Se quedaron impresionados con las posibilidades que esto nos ofrece», comenta Raf Roos.
«Nos encontramos en una posición ideal para acceder a nuevos mercados que, si no hubiéramos invertido en la tecnología inkjet UV y específicamente en el equipo N610i, sin duda no habríamos podido alcanzar», concluye.