Las preocupaciones por el medio ambiente que giran en torno a los residuos de plástico no reciclables han provocado el crecimiento de soluciones «sostenibles» alternativas que se parecen en aspecto y función al plástico tradicional, pero que se pueden transformar en compost al final de su vida útil, con lo que se ayuda a combatir el exceso de residuos.
Aunque en teoría suene bien, en la práctica la solución no es tan sencilla, ya que muchos reconocen ahora que un uso inadecuado de los envases de plástico compostable podría provocar más perjuicio que beneficio. Al igual que con cualquier nuevo material para los envases, el uso de los plásticos compostables exige un examen minucioso.
En nuestra publicación más reciente del blog sobre el diseño de envases sostenibles, pretendemos arrojar algo de luz a los debates referentes a los plásticos compostables y ofrecer algunas alternativas a los fabricantes que pretenden explorar nuevas soluciones de envases.
En esta entrada del blog, hablamos con el Dr. Adam Read, director de asuntos externos de SUEZ Recycling and Recovery UK Ltd, y presidente de la Chartered Institution of Wastes Management, y Steve Thomas, director adjunto de Ciencias Aplicadas de Cambridge Consultants, acerca de los inconvenientes y las oportunidades que plantean los plásticos compostables.
¿A qué nos referimos con el término «plástico compostable»?
El desafío de los plásticos compostables
Una preocupación habitual relacionada con el plástico compostable es su eliminación: si un consumidor desecha incorrectamente un recipiente de plástico compostable en un contenedor de reciclaje, puede contaminar los residuos reciclables que se encuentren a su alrededor.
Según señala el Dr. Adam Read, director de asuntos externos de SUEZ Recycling and Recovery UK Ltd: «Los sistemas de recuperación y reciclaje de residuos han evolucionado para procesar materiales que se usan de forma generalizada como envases». El hecho de introducir nuevos materiales, sin un examen detallado de los sistemas existentes y su capacidad de flexibilizarse o adaptarse, puede resultar problemático, al introducir lo que se considera un contaminante en el proceso de reciclaje mixto.
«Las instalaciones de recuperación de materiales están diseñadas para separar y procesar materiales que valoramos y los materiales que los municipios quieren reciclar, como el PET, el aluminio, el acero, el vidrio y el cartón», declara. «Al introducir nuevos materiales, no hay garantías de que se incorporen al proceso como cabría esperar, por lo que pueden contrarrestar la capacidad del sistema para capturar determinados materiales existentes».
«La mayoría de los sistemas actuales están diseñados para reconocer distintos materiales mediante una clasificación en función del color y la densidad, así que, si una botella de plástico compostable se parece mucho a una botella de PET tradicional, un sistema de reciclaje probablemente piense que es una botella de PET», prosigue Read.
Basta una pequeña cantidad de material compostable para contaminar los procesos habituales de reciclaje de plásticos, lo que daría lugar al desperdicio de enormes cantidades de material reciclable. Por todo ello, en enero de 2020, WRAP publicó nuevos recursos orientativos para ayudar a las empresas a tomar decisiones fundadas a la hora de plantearse el uso de envases compostables.[i]
«Las empresas han de ser claras sobre si es viable [usar plásticos compostables], dadas las complejidades que rodean a la infraestructura actual de tratamiento», afirma Helen Bird, especialista en gestión de recursos de WRAP. «Es fundamental que los mercados finales de los plásticos reciclados no se vean en peligro; las personas necesitan instrucciones claras para no tirar los plásticos compostables al contenedor de reciclaje».[ii]
¿Qué debería ser compostable?
Para Steve Thomas, director adjunto de ciencias aplicadas de Cambridge Consultants, la clave de un buen uso de los compostables radica en encontrar esas áreas en las que la recogida y el reciclaje de los plásticos de un solo uso sean problemáticas, y en las que tendría sentido que un consumidor tirara algo en un contenedor de residuos alimentarios.
«Al diseñar un producto, es importante plantearse el modo en que un consumidor debería eliminarlo al final de su vida útil», declara. «No tiene sentido diseñar elementos compostables que se parezcan a las botellas de PET, porque los consumidores naturalmente los colocarán en el contenedor de reciclaje, que no es el lugar donde deben acabar los plásticos compostables».
Por comparación, actualmente no hay un proceso de eliminación de residuos ideal para las cosas muy contaminadas con alimentos y que son difíciles de reciclar. Esos elementos pueden provocar problemas cuando se introducen en los procesos de reciclaje tradicionales, y pueden favorecer las emisiones de metano que se producen a partir de la digestión anaeróbica de los residuos alimentarios residuales si se envían al vertedero.
El segundo aspecto mencionado quizá sea el más importante para cualquier debate en torno a los envases compostables, ya que las emisiones de metano de los vertederos contribuyen significativamente a las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, y los gobiernos de todo el mundo se están comprometiendo a introducir una recogida obligatoria de residuos alimentarios domésticos en una apuesta por contener estas emisiones.
Entre los reglamentos que entrarán en vigor próximamente figuran:
- La Directiva (UE) 2018/851 del Parlamento Europeo y del Consejo: esta directiva exige la introducción de una recogida separada de residuos alimentarios desde el 1 de enero de 2024 dentro de la UE.
- La Estrategia de Recursos y Residuos del Gobierno del Reino Unido: esta estrategia recoge la introducción de una recogida separada de residuos alimentarios en el Reino Unido de aquí a 2023.
Estos reglamentos de próxima aplicación presentan una enorme oportunidad para los envases de plástico compostable si se usan de la forma correcta. En las secciones siguientes se identifican algunas situaciones que podrían ser apropiadas para las empresas que se plantean el uso de plásticos compostables para facilitar la recogida de residuos alimentarios adicionales.
1. Tarros, tarrinas y bandejas muy sucios
Una de las situaciones más mencionadas en la que los envases compostables podrían resultar útiles es en los envases en contacto con alimentos, donde el producto está muy contaminado con residuos alimentarios y cuya limpieza es difícil para los consumidores, por ejemplo, las bandejas de las comidas precocinadas aptas para microondas.
«Actualmente, existe un problema con la eliminación de estos artículos», afirma Thomas. «Si un consumidor los tira en el contenedor de reciclaje, existe el riesgo de que contaminen a otros envases reciclables, o tendrían que lavarse antes con el consiguiente gran consumo de energía y agua para hacerlo. Por este motivo, normalmente se envían al vertedero».
En cambio, una bandeja compostable apta para microondas, se podría echar en el contenedor de residuos alimentarios en zonas donde existan instalaciones de compostaje industrial o, en función del material, en una instalación de compostaje doméstico. Cualquier resto de alimento que quede en la bandeja se convertiría en compost en lugar de ser un residuo alimentario que termina en el vertedero. Esto también reduciría el número de bandejas que se envían al vertedero y mejoraría la calidad de los envases reciclables al dejar a los productos contaminados fuera de estos contenedores de reciclaje.
2. Envases en contacto con alimentos flexibles
El envoltorio de plástico flexible es un rasgo popular de las aplicaciones de alimentos y bebidas en envases que van desde las porciones de condimentos (sobres o bolsas) hasta las ensaladas preparadas y preenvasadas o las bolsas de los congelados. Sin embargo, estos materiales pueden representar todo un desafío desde el punto de vista del reciclaje.
«Los films son un verdadero problema para el sector ahora mismo», declara Read. «Se pegan a las cosas y se enredan con otros elementos reciclables. En el Reino Unido hay sistemas de reciclaje que pueden procesar los films, pero son más caros. Desafortunadamente, la gran parte de los sistemas de reciclaje no se han diseñado para procesarlos, ya que la mayoría de las autoridades locales no los han recogido históricamente».
Los plásticos compostables podrían desempeñar su función en este sentido, sobre todo cuando los productos se han contaminado con alimentos, como es el caso de las bolsas o los sobres de porciones individuales. En una situación de ese tipo, los envases compostables y cualquier resto podrían, nuevamente, desecharse juntos en un contenedor de residuos alimentarios para su recogida y tratamiento.
3. Cosas destinadas al cubo de reciclaje de compost
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Determinadas cosas a menudo terminan en el compostaje doméstico, o en la recogida de residuos orgánicos, pese a contener plásticos convencionales no compostables. Entre los productos de ese tipo figuran las bolsas de té, que muchos consumidores dan por sentado incorrectamente que son totalmente compostables, y las pegatinas de la fruta y la verdura, que se suelen tirar con su piel.
En estos ejemplos en los que los plásticos convencionales a menudo acaban en los residuos orgánicos, tiene sentido adoptar otro tipo de alternativas compostables, que mejoren la calidad del compost final. Resulta interesante que WRAP destaca las bolsas de té como uno de los productos en loas que siempre deberían usarse envases de plástico compostables en lugar de los plásticos tradicionales, ya que a menudo se desechan en el contenedor de residuos orgánicos.[i]
Otra aplicación interesante que tener en cuenta es la de las cápsulas de café. El uso de una alternativa compostable para las cápsulas de café no reciclables permitiría que la cápsula y los restos de café se transformaran juntos en compost. Esto reduciría el número de cápsulas que se envían al vertedero, además de mantener las cápsulas no reciclables y contaminadas con café fuera de los contenedores de reciclaje.
Por un etiquetado correcto
Garantizar que el consumidor conozca los métodos correctos de eliminación de residuos es sumamente importante a la hora de considerar el uso de soluciones de plástico compostable. Los fabricantes que utilizan plásticos compostables deberían procurarse de que todos los elementos tengan un etiquetado claro para evitar el riesgo de que los materiales compostables se eliminen de forma inadecuada, y contaminen el entorno natural o los sistemas convencionales de reciclaje de plástico.
Se deberían tener en cuenta consideraciones como las diferencias en los sistemas regionales de reciclaje; por ejemplo, al utilizar materiales compostables industrialmente, las marcas deberían proporcionar orientación sobre cómo eliminar un elemento si no existe una instalación de compostaje industrial.
WRAP recomienda que los fabricantes consideren implementar un etiquetado que indique a los consumidores cómo desechar correctamente el producto , en lugar de utilizar mensajes como «100 % compostable» sin aportar información sobre su eliminación. En el documento Considerations for Compostable Plastic Packaging. de WRAP, figura una lista de acciones recomendadas.
Cuando escasee el espacio en el envase, la información podría incluirse con un código 2D, como un código QR o DataMatrix, para facilitar el acceso a la información a los consumidores y que la puedan consultar a través del teléfono o la tablet. La principal ventaja de usar un código 2D para aplicaciones de este tipo es que no hay límites en la extensión de la información que puede proporcionar.
El uso de normas como GS1 Digital Link podría llevar esto un paso más allá, ya que se podría identificar la ubicación de un consumidor y proporcionarle información personalizada en función de la capacidad de reciclaje del lugar donde se encuentre, e incluso se podría incluir un enlace al punto de reciclaje más cercano.
Domino está aquí para ayudarte
Los materiales compostables son un avance interesante e innovador en el mercado de los envases. Sin embargo, como con cualquier cambio de material, el uso de los envases compostables exige un examen minucioso.
Como líder de la industria del sector de la codificación y el marcaje, nos esforzamos mucho por asesorar y apoyar a nuestros clientes durante su trayectoria hacia la sostenibilidad, con el objetivo de minimizar los riesgos implícitos en el diseño en pro de la sostenibilidad. Nuestro equipo de investigación y desarrollo se ha comprometido con el desarrollo de soluciones de codificación adaptadas a envases nuevos, incluidos los materiales compostables, y la mejora de las soluciones de plástico reciclable.
En la Academia Laser de Domino en Alemania, nuestros técnicos expertos trabajan para desarrollar soluciones de films compostables y envases resistentes al calor. Conforme las soluciones de envases compostables van mejorando, continuamos nuestra labor interna de investigación y desarrollo para garantizar que disponemos de las soluciones que admitan los sustratos más novedosos.
Si te estás planteando un cambio a los materiales compostables y quieres conocer las diferentes soluciones de codificación y marcaje disponibles para tus necesidades específicas, ponte en contacto con nosotros. Contamos con un equipo de expertos que te asesorarán sobre la mejor forma de fabricar productos que puedan aceptar los distribuidores, que sean valorados por los consumidores y que aporten confianza para todos aquellos que se preocupan por el medioambiente.
[i] WRAP, Considerations for Compostable Plastic Packaging, 2020, consultado el 22 de noviembre de 2021, https://www.wrap.org.uk/sites/files/wrap/Considerations-for-compostable-plastic-packaging.pdf.
[ii] WRAP, New guidance to address confusion of compostable plastic packaging, consultado el 14 de diciembre de 2021, https://wrap.org.uk/media-centre/press-releases/new-guidance-address-confusion-over-compostable-plastic-packaging#.
[iii] WRAP, Considerations for Compostable Plastic Packaging, 2020, consultado el 22 de noviembre de 2021, https://www.wrap.org.uk/sites/files/wrap/Considerations-for-compostable-plastic-packaging.pdf.